EL IMPERIO ROMANO
( 168 AC- 476 DC)
DANIEL 2:40 Y el cuarto reino será fuerte como hierro; y como el hierro desmenuza y rompe todas las cosas, desmenuzará y quebrantará todo.
Antes de que iniciara su opresión el imperio romano, los judíos tuvieron un breve lapso de independencia
El periodo de independencia judía.
Por primera vez en cuatrocientos años los judíos habían recobrado su independencia, pero casi en seguida comenzaron las luchas intestinas. Los mismos Casidim (los santos) que respaldaron el amotinamiento de los macabeos, se opusieron a Juan Hircano no únicamente por no ser del legítimo linaje de los sumos sacerdotes, sino porque había conducido guerras, una actividad que según ellos era inapropiada para un sacerdote. Juan no les prestó atención alguna. Atacó a los samaritanos y destruyó el templo que éstos tenían en el monte Gerizim. Atacó luego a los idumeos en el desierto al sur y los obligó a convertirse al judaísmo ( Herodes, el Grande fue un descendiente de estos idumeos ). Janio Alejandro, hijo de Juan, era uno de los más aguerridos. Completó la conquista de toda la región hasta que el estado judío fue tan grande como el de David. Abiertamente asumió el título de “rey” además del de “ Sumo Sacerdote”.
Los Casidim, mejor conocidos como fariseos, se le opusieron enérgicamente. Para vengarse, descargó sobre ellos atrocidades espantosas. En cierta ocasión mandó crucificar a 800 de ellos en hileras, en un lugar donde pudiera verlos morir mientras se dedicaba a una francachela de borrachera con sus concubinas. Los judíos, pues, sufrieron más a manos de sus mismos coterráneos que a manos de los reyes extranjeros.
A la muerte de Janio, su viuda Salomé Alejandra gobernó. Sus dos hijos en abierta lucha se disputaron el dominio. El mayor, Hircano, fue declarado Sumo Sacerdote, pero Aristóbulo buscó la ayuda de los saduceos para hacerle oposición. Los saduceos se interesaban en la observancia estrictamente literal de la ley de Moisés, pero en otros aspectos se inclinaban a favor de la forma de vida de los griegos. Cuando la reina Alejandra murió, Aristóbulo ocupó el trono, pero Hircano, con la ayuda de su ministro, Antípater de Idumea, se levantó contra él.
Sucedió que un famoso general romano, Pompeyo estaba en Damasco su ejército. Ambos hermanos apelaron a él para arbitrara su disputa. Pompeyo, al verse invitado en esta forma, se dirigió a Jerusalén con su ejército. Los dos hermanos lo habían invitado, pronto se dieron cuenta de el que había ido a arbitrar se había convertido en el amo. Algunos judíos se refugiaron en el templo pero los romanos los sometieron finalmente. Pompeyo penetró en el lugar santísimo del templo, y Roma asumió el dominio sobre Palestina.
El hecho más notable del siglo de independencia judía fue la separación de la sociedad en sectas: los fariseos, los saduceos y los esenios. Estos últimos para escapar de la maldad de aquellos tiempos, optaron por replegarse a monasterios.
Después de la muerte de Alejandro, su imperio de debilitó y dividió, y en el año 168 a.C. Roma, el imperio de hierro, derrotó a los griegos en la batalla de Pidna. César Augusto gobernaba el Imperio Romano cuando Cristo nació (S. Lucas 2:1). Cristo y sus apóstoles vivieron en el período representado por las piernas de hierro. Gibbon, historiador del siglo XVIII, sin duda tenía la profecía de Daniel en mente cuando escribió: “Las imágenes de oro, plata o bronce que podían servir para representar a las naciones y sus reyes, fueron sucesivamente quebradas por la férrea monarquía de Roma”. En el año 168 A.C., tocó el turno al Imperio Romano subir al poder. El hierro simboliza a este Imperio con exactitud: su disciplina militar, su dominio sobre los pueblos conquistados, sus leyes, todo era como el hierro.
El período del IMPERIO ROMANO.
(a) El período del reino subordinado. Pompeyo, el general romano, instaló a Hircano II como gobernador bajo los romanos. Debía llamarse etnarca y no rey. Sin embargo, Antípater era el que en realidad mantenía el dominio del país. Tuvo la habilidad de irse ganando el apoyo de los hombres que luchaban por conseguir el mando del gobierno romano a medida que llegaban a la cima. Fue amigo de Pompeyo, luego de Julio César cuando éste derrocó a Pompeyo, después de Casio, uno de los asesinos del César.
Obtuvo de Julio César privilegios especiales para los judíos: derecho de recoger impuestos para el Templo en todo el imperio romano, excepción del servicio militar, y otros más. Los judíos retuvieron estos privilegios muchos años. Uno de los hijos de Antípater se llamó Herodes. Éste sucedió a su padre como ministro ante Hircano.
Cuando los partos invadieron Palestina para instalar en el trono a uno de los descendientes de Aristóbulo, Herodes escapó a Roma. En ese entonces Antonio era el hombre fuerte en Roma. Con la ayuda de éste, Herodes consiguió que el Senado de Roma le nombrara “rey de los judíos”. Respaldado por las armas romanas, Herodes volvió a tomar Palestina con gran derramamiento de sangre. Casi todos los judíos lo odiaron por esto y porque era irumeo, solamente medio judío. A pesar de eso, su reinado fue vigoroso y eficaz. En forma despiadada puso fin al desorden y promovió el bienestar económico.
Construyó una ciudad portuaria, Cesarea, y buscó la forma de aumentar su prestigio erigiendo, con despilfarro, monumentos en las ciudades exóticas como Atenas. Aunque decía ser judío leal, se mostraba más interesado en fomentar la cultura griega. Construyó teatros, gimnasios y edificios públicos al estilo griego. A la vez, construyó un suntuoso altar sobre la tumba de los patriarcas en Hebrón. Aún más importante que todo esto empezó la construcción de un nuevo templo en Jerusalén, templo que tardaría casi un siglo en terminarse y que dado su tamaño, esplendor y belleza habría de ser considerado uno de los más imponentes edificios del mundo. Éste fue el templo en el que enseñó Jesús, y cuya destrucción profetizó.
Cuando Octavio, que más tarde se llamó Augusto, llegó al poder, Herodes obtuvo su respaldo. Pero su gobierno fue esta vez más tiránico. Mantuvo el orden por medio de una alta burocracia, con un ejército de mercenarios ( la mayor parte sirios ), y una policía secreta. Fue cruel, suspicaz y vicioso en su vida privada. Mató a su propia esposa Mariana, a quien todos querían, y a tres de sus hijos. Poco antes de su muerte, ya estaba planeando dar muerte a los otros. En cierta ocasión Augusto dijo de Herodes que “preferiría ser el cerdo de Herodes antes que su hijo” dando a entender que era menos probable que el cerdo fuera degollado. Cuando ya casi al fin de su perversa vida oyó decir que un niño había nacido como “el rey de los judíos “ no fue de extrañar que diera orden de llevar a cabo la masacre de los niños de Belén en un intento de darle muerte a Jesús.
(b) El período de la división de Palestina. A la muerte de Herodes en el año 4 a. C su reino fue dividido entre sus tres hijos: Felipe, que recibió la región del Norte y Este de Galilea; Herodes Antipas, que recibió Galilea y Perea, y Arquelao, que obtuvo Judea, Samaria e Idumea. Como Arquelao, para mal suyo, no manejó bien su parte que le tocó, en el año 6 d. C. Augusto lo depuso e hizo de Judea una provincia del imperio, gobernada por un representante personal del emperador conocida como procurador. Durante la vida de Jesús , Galilea seguía gobernada por Herodes Antipas.
Judea como provincia romana. El primer procurador fue Pomponio. Bajo este nuevo régimen se hizo otro censo semejante al que se llevó a cabo cuando José y María fueron a Belén. Esto provocó la rebelión de un partido conocido como el de los zelotes, encabezada por Judas de Galilea. Ésta fue sofocada cruelmente, y muchos de los rebeldes fueron crucificados.
El emperador Augusto le sucedió Tiberio, y los procuradores continuaron gobernado Judea. Después de tres procuradores de poca importancia cuyo más importante hecho fue deponer al sumo sacerdote Anás para poner en su lugar a su yerno Caifás, apareció en el escenario Poncio Pilato, un italiano. Desde el comienzo Pilato contendió con los judíos. Intentó forzarlos a que aceptaran imágenes del emperador, y únicamente desistió de su intento al ver que ellos pasivamente preferían ser degollados antes que aceptar. Trató de usar parte de los ingresos del templo para construir abastecedores de agua para Jerusalén, hecho que los hizo enfurecer aún más.
Los dirigentes judíos lo consideraban desalmado y obstinado, y siempre estaban tratado de acusarlo ante el emperador. Finalmente, después de su participación en la crucifixión de Jesús, interfirió en el asunto de los samaritanos y lo llamaron a Roma para responder por su mal manejo de los asuntos. Pilato se suicidó más tarde, según escritores ulteriores. Agripa ( Herodes Agripa ) como se le conoce en el Nuevo Testamento, nieto de Herodes, se ganó el favor de Casius Calígula, el nuevo emperador. Cada vez le concedía más territorio. Cuando el insano Calígula pretendió que su imagen fuera adorada en el Templo de Jerusalén, Agripa consiguió disuadirlo. Cuando Claudio llegó a ser emperador, a Agripa le fue dada Judea y también
(a) el título de “rey”, quedando de nuevo Palestina como un reino unido. Agripa fue popular entre los judíos, y tuvo éxito en sus tratos con los romanos. Esto dio motivo a que se llenara de orgullo. A esto se atribuye que iniciar la persecución de los cristianos, durante la cual mató a Santiago y puso en prisión a Pedro. Repentinamente y en presencia del pueblo, le sobrevino una enfermedad repugnante de la que murió.
A su muerte, Judea de nuevo volvió al estado de provincia Las cosas se agravaron durante los dos procuradores siguientes, Casius Fadus y Tiberio Alejandro. Se levantaron falsos profetas incitando al pueblo a lanzarse en rebelión y las luchas con los samaritanos se acrecentaron. Luego llegó como procurador Félix, quien en cierta ocasión había sido esclavo. Se enamoró de Drusila, hija de Agripa I , la persuadió a que se divorciara de su marido y se casara con él. El hermano de Drusila, Agripa II , fue hecho rey de la parte septentrional de Palestina. El apóstol Pablo, como recordarán tuvo que enfrentarse a esta gente. Félix fue sustituido por Porcio Festo y ante y ante éste Pablo fue llevado por segunda vez y pidió la apelación al Cesar, el emperador Nerón.
El emperador Claudio fue asesinado y tomó su lugar Nerón, uno de los más viles y nefastos gobernantes que el mundo ha conocido. Cuando la ciudad de Roma fue destruida por un incendio, el pueblo sospechó que el mismo Nerón había iniciado el fuego. Para desviar las sospechas, Nerón echó la culpa a los cristianos, y mandó que se les castigara con toda clase de atrocidades : mandó a echarlos a los leones en la arena o a sumergirlos en alquitrán, para luego usarlos como antorchas que alumbraran sus holgorios. A partir de este momento, el cristianismo fue declarado una religión ilegal que el gobierno romano trató de destruir, aunque no siempre por los mismos medios. En Judea, mientras tanto, los judíos se habían conjurado y rebelado contra los procuradores de Nerón: Albino y Floro. Un grupo de terroristas llamados sicarios ( los asesinos ) mataban tanto a judíos como a romanos.
(b) La primera rebelión judía. Sin hacer caso a las advertencias de sus cabecillas, sino siguiendo las incitaciones de muchos falsos profetas y aprovechando el debilitamiento de los romanos por las insensateces de Nerón, los judíos se levantaron en rebelión contra Roma. Al principio estaban triunfando, pero Vespasiano gradualmente los hizo retroceder. Nerón se suicidó y después de que otros tres no lograron mantenerse en el trono como emperadores más de unos cuantos meses, Vespasiano se apoderó del trono en Roma, dejando a su hijo Tito la tarea de terminar la guerra con los judíos. Inoxorablemente, Jerusalén cayó en el año 70 d.C. La profecía de Jesús se cumplió, el templo fue echado abajo, y desde ese día los sacrificios diarios cesaron. Millares de judíos fueron torturados, crucificados y muertos,. Ningún judío quedó con vida en Jerusalén, y la nación entera quedó en ruinas. Aún hoy se puede ver el arco monumental erigido por Tito con el cual conmemoró su victoria, y en el que se ven las esculturas en relieve de los famosos veladores de oro del templo
(c) La segunda rebelión judía. A despecho de este desastre, los falsos profetas y mesías seguían empeñados en engañar a los judíos haciéndoles creer que aún podían vencer a Roma. Uno de los más famosos, Bar Koba, respaldado por el rabí Akiba, se declaró en rebelión durante la época del emperador Adriano. Cuando fue totalmente aplastado, quedó prohibida para los judíos no solamente Jerusalén, sino toda Palestina. A Jerusalén se le bautizó con un nuevo nombre; Júpiter Capitolino. Esto causó un cambio en la religión de los judíos, ya que se hizo imposible la practica de los sacrificios. Los rabíes ejercían dominio sobre el pensamiento judío, y crearon el judaísmo que hoy conocemos. Actualmente el regreso de los judíos a Palestina es un hecho después de casi dos mil años de exilio.
CONCLUSIÓN:
Como podemos ver Jehová, nuestro Señor el es el que dicta los tiempos y edades del hombre, el es el que levanta reyes y destrona reyes. Dios en su inmensa sabiduría, magnificencia y misericordia le aviso con tiempo 150 años antes al pueblo judío por medio del profeta Isaías y Jeremías que se arrepintieran de sus pecados, de la apostasía en que había caído el pueblo de Israel. Como castigo se llevo al pueblo Israel cautivo por 70 años a Babilonia.
En este grupo de cautivos en la primera invasión el Señor se lleva a cuatro príncipes entre estos Daniel que era un joven de hermoso aspecto sin tacha alguna y los otros tres que seria su equipo de trabajo por medio de Daniel el Señor revela su plan perfecto desde el año 605 A.C. hasta su segunda venida, para esto tuvo el Señor que mandar mucho sufrimiento al pueblo de los judíos como vemos en el libro de lamentaciones, cuando fue sitiado por Nabucodonosor y durante todo su cautiverio en Babilonia.
Después el Señor en su inmensa misericordia hace volver a su pueblo a Jerusalén por medio de Ciro el Grande, quedándose Daniel al servicio de los medo- persas hasta muy avanzada edad porque es ahí donde le iva servir a Dios en su plan perfecto.
Los siguientes imperios el griego y el romano fueron necesarios para que el ser humano lograra comprender y estuviera preparado cuando Cristo vino la primera vez a la tierra, pero aún así fue rechazado por el pueblo judío. Ellos esperaban a un mesías con poder, pero en vez de eso Cristo vino atraerle el reino de los cielos con humildad, amor y paz. Es por esto que los judíos no lo reconocieron. Pero Cristo es la roca no cortada con mano humana que vendría a vencer todos los reinos de la tierra para establecer su reino eterno en la tierra por siempre. Amen.
Bendiciones de lo alto
SI TE HA GUSTADO ESTA PÁGINA
DEJANOS TU COMENTARIO
Y GRACIAS POR VISITARLA