LOS CEREALES EN LAS ESCRITURAS

 

El Trigo

 

Dice Jeremías 41:8: “...tenemos en el campo tesoros de trigos y cebadas y aceites y miel...” Para los pueblos de la Biblia, el trigo era uno de los grandes tesoros como alimento, tal como lo es hoy alrededor del mundo. En ese tiempo, el trigo, o cualquier producto derivado del trigo, era más valioso que algo simplemente para comer. El trigo podía representar la diferencia entre la vida y la muerte debido a su valor nutricional y a la protección que ofrecía contra una hueste de enfermedades incapacitantes y a menudo mortales.

 

El trigo verdaderamente era “el báculo de la vida”. Debido a que era una parte importante en la supervivencia diaria se convirtió en un símbolo religioso tanto para judíos como para cristianos. Una cosecha abundante era una bendición de Dios, no sorprende entonces que se considerara a las hambrunas periódicas como señal de su enojo.

 

Por lo tanto, no sorprende que las personas de esos tiempos esperaran comer algún plato con granos en cada comida, incluso aunque fuera sólo un pedazo de pan remojado con miel. Las personas de los tiempos bíblicos comían sus granos hervidos y secos, remojados y tostados, y en ocasiones hasta los comían verdes, acabados de arrancar de la planta. Los molían, los ponían a secar, los trituraban y horneaban en cacerolas, los hacían cocido con leche y endulzados con miel, sopas, ensaladas y postres, tales como los budines y flanes.

 

Estaba por ejemplo, el famoso pan de Ezequiel, el cual contenía casi todos los granos disponibles en ese tiempo: “Y tú toma para ti trigo, cebada, habas, lentejas, millo y avena, y ponlos en una vasija, y hazte pan de ellos...” (Ez. 4:9a). Además, los eruditos bíblicos dicen que el pan de Ezequiel era un alimento para sobrevivir durante los días duros de la conquista de Babilonia. Los israelitas tenían que depositar su fe en este alimento hecho de diversos granos para mantener su buena salud y seguir luchando.

 

Hipócrates, quien vivió cuando se desarrollaron muchos de los eventos históricos de la Biblia, registró mucha información recogida de sus vecinos hebreos cuando recomendó el pan de trigo entero como un laxante superior. Mucho del trigo que comían los israelitas era de hecho el trigo con la cáscara, en donde se encuentra toda la fibra. Está ahora bien establecido, cuán crítica es la fibra para una digestión saludable y una función eficiente de los intestinos. El trigo con cáscara contiene también vitamina B y proteína. He aquí algunos de los beneficios que se recibe con una onza de trigo tostado con cáscara:

 

Calorías 60

Fibra 12 g

Grasa 1 g

Potasio 410 g

Carbohidratos 18 g

Proteína 5 g

 

El germen de trigo es considerado excelente por su valor nutritivo. Un cuarto de taza contiene cinco gramos de fibra, al igual que vitamina B, hierro, magnesio y zinc. También es rico en cromo, manganeso y vitamina E. El trigo entero con cáscara contiene el triple de fibra que se encuentra en el pan blanco y es mucho más rico en magnesio y vitamina B.

 

El alto contenido de fibra en el salvado, la cáscara de trigo, es una de las fuentes más ricas conocidas para la dieta. Nada se compara al valor de esta fibra para hacer que los deshechos sean expulsados regularmente de nuestro cuerpo. La fibra de trigo es nuestra mejor protección y cura para el estreñimiento. Previene las infecciones intestinales, hemorroides, venas varicosas, mientras mejora las funciones intestinales. El trigo también resguarda contra el cáncer del colon. Los doctores enfatizan que cualquier cosa que podamos hacer para minimizar los problemas digestivos y del intestino, reducen profundamente el riesgo de que se desarrolle el fatal cáncer del colon.

 

Recientemente, un grupo de investigadores en una clínica nutricional en Inglaterra se dispuso a comparar la efectividad de varias fibras vegetales en nuestra dieta. A los voluntarios se les dio salvado, cáscara de trigo, zanahorias, repollo y manzanas. La conclusión fue que mientras todos los vegetales eran benéficos, ninguno se aproxima a la efectividad del salvado. Expertos informan que en otras partes del mundo hoy, en donde las personas consumen más fibra que en Estados Unidos, los desórdenes en el colon y los intestinos son muy raros. Eso mismo era cierto en las tierras bíblicas en donde las dietas ricas en fibra eran cosa común.

 

Sólo se requieren tres cuartos de una taza de salvado al día para aumentar el tamaño de las deposiciones, lo cual es importante para evitar el estreñimiento y otros problemas del colon. Para recibir esa misma cantidad de fibra de otros alimentos, sería necesario comerse catorce rebanadas de pan de trigo entero, cuatro y media tazas de zanahorias cocidas, cinco tazas de repollo cocido u once manzanas.

Pero la cura para el estreñimiento es sólo la primera de los muchos beneficios para la salud que ofrece el trigo. La mayoría de los investigadores están convencidos, que entre más cereales comemos, menos riesgo tenemos de sufrir cáncer de los intestinos y del recto.

 

Según un estudio documentado por la Fundación Americana de la Salud y realizado entre granjeros en Finlandia, cuya dieta normal es alta en grasa debido a los productos lácteos, la tasa de cáncer en el colon se redujo, cuando debía haber ascendido. Los investigadores concluyeron que la razón se debía a que estos hombres comían grandes cantidades de trigo y de salvado, confirmando la creencia que el alto contenido de fibra en la dieta, de alguna forma bloqueaba la formación de los cánceres que son a menudo un resultado del alto consumo de grasa.

 

Esto es lo que ocurre aparentemente: El proceso digestivo normal produce ácidos de bilis que pueden estimular el crecimiento del cáncer. También se sabe que los cancerígenos que se encuentran en el ambiente se están moviendo constantemente en nuestro cuerpo. Estos cancerígenos, a menudo los rastros de pesticidas que quedan en las frutas son prácticamente inevitables en la vida moderna.

 

Lo que podemos hacer es cambiar la dieta para ayudar a nuestro cuerpo a que elimine estas sustancias peligrosas tan rápidamente como sea posible, antes de que comiencen a hacernos daño. Comer buenas cantidades de fibra, particularmente salvado, aumenta el tamaño de las deposiciones. Este movimiento rápido a lo largo del colon, recolectando químicos no deseados y expulsándolos rápidamente mejora las posibilidades de evitar el cáncer.

 

Docenas de estudio realizados alrededor del mundo ahora, han confirmado que los productos derivados del trigo y de otros alimentos ricos en fibra, significan menos incidencia de cáncer en el colon.

 

La Cebada

 

Leemos en la Escritura: “Tierra de trigo y cebada, de vides, higueras y granados; tierra de olivos, de aceite y de miel” (Dt. 8:8).

 

“Aquí está un muchacho, que tiene cinco panes de cebada y dos pececillos; mas ¿qué es esto para tantos?... Recogieron, pues, y llenaron doce cestas de pedazos, que de los cinco panes de cebada sobraron a los que habían comido” (Jn. 6:9, 13).

 

La Biblia está colmada con referencias a la cebada, la cual se encuentra entre los granos más conocidos en la antigüedad y más nutritivos jamás cultivados. De hecho, algunos eruditos dicen, que la Fiesta de los Panes sin Levadura era la festividad antigua de la siega de la cebada que se convirtió en la celebración de la Pascua: “Estas son las fiestas solemnes de Jehová, las convocaciones santas, a las cuales convocaréis en sus tiempos... Y a los quince días de este mes es la fiesta solemne de los panes sin levadura a Jehová...” (Lv. 23:4, 6).

 

Expertos en historia bíblica dicen que la cebada no es tan valiosa como el trigo. Pero era el alimento básico de las multitudes y como tal un rasgo prominente de estos primeros hebreos. Por consiguiente, el hecho que la cebada se mencione tan a menudo demuestra que el pueblo del período bíblico consumía grandes cantidades de este grano, el cual desempeñaba un papel vital en su salud y sanidad, fuera que lo supieran o no.

 

Por miles de años la cebada ha disfrutado de gran reputación como alimento que mejora la potencia, el vigor y la fortaleza. A los gladiadores romanos a menudo se les llamaba «hordearil» que significaba «comedores de cebada», porque este grano se le añadía a su dieta para aumentarles la energía antes de sus enfrentamientos. Hoy sabemos por estudios, que la cebada es uno de los tres almidones balanceados, y que el arroz y la papa son los otros dos. Son ricos en complejos carbohidratos que alimentan el cuerpo con una corriente constante de energía.

 

Incluso hoy, la cebada todavía es un alimento importante a través de todo el Medio Oriente, lo cual tal vez es la causa para la tasa generalmente baja de enfermedades del corazón en esa parte del mundo. En algunos lugares la cebada se recomienda como “medicina para el corazón”. Los nutricionistas dicen que contiene un tipo de fibra que puede aminorar el riesgo de las enfermedades del corazón al reducir los niveles de coágulos en las arterias. En estudios médicos se ha comprobado que una dieta que incluya cebada abundante, tres veces al día, ha reducido el nivel del colesterol en un 15%.

 

Ese mismo alto contenido de fibra mantiene normales las funciones intestinales, alivia el estreñimiento y protege contra una amplia variedad de problemas digestivos. También puede ayudar a bloquear el cáncer. Como cualquiera que ha hecho un estudio de la Biblia sabe, el pan hecho con cebada u otras harinas de grano entero, era considerado tan vital para la buena salud y una vida larga, que se le llamaba «el báculo de la vida». No sorprende que los expertos en medicina moderna, estén haciendo investigaciones respecto a sus beneficios.

 

Se ha descubierto que la cebada es efectiva para acabar con la producción del colesterol malo que hace tanto daño a nuestras arterias, tanto que puede provocar ataques de apoplejía y al corazón. En un interesante estudio sobre animales, los investigadores del Departamento de Agricultura de Estados Unidos descubrieron que la producción del colesterol malo se redujo en un increíble 18% cuando se le añadió a su dieta grandes cantidades de cebada.

En estudios continuados, científicos de la Universidad Estatal de Montana descubrieron que una dieta alta en cebada tenía exactamente el mismo efecto en las personas. En ese estudio un grupo de hombres comió gran cantidad de cereal, pan, bizcochos y molletes hechos de harina de cebada. Después de seis semanas y de comer cebada tres veces al día, los niveles de colesterol descendieron un promedio de 15%. Esos cuyos niveles de colesterol eran los más altos al comienzo, fueron los que mostraron la mejoría más significativa. Otro grupo consumió el mismo producto hecho de harina de trigo o de salvado, pero su conteo de colesterol no disminuyó, llevando a los investigadores a concluir que la respuesta tenía que encontrarse en la fibra que contiene la cebada.

 

Otro estudio de la Facultad de Medicina de la Universidad de Winsconsin encontró que los pacientes a quienes se les practicó cirugía de corazón abierto, los niveles de colesterol descendieron de un 9 a 18% si su dieta postoperatoria incluía cápsulas de cebada. El aceite claramente tiene el mismo efecto como el grano en la producción de colesterol del hígado. Los investigadores ahora dicen que el siguiente paso, es descubrir cuál de los diferentes tipos de cebada contiene los ingredientes más poderosos para combatir el colesterol.

 

Esos mismos investigadores también están examinando la cebada y sus ingredientes para saber si puede usarse en la lucha contra el cáncer. La mayoría de las semillas, incluyendo la cebada, contienen químicos naturales llamados inhibidores de la proteasa. Significativamente, estas poderosas fuentes de energía van en contra de los agentes que causan el cáncer en nuestros cuerpos y ayudan a derrotarlos por completo antes que comiencen a formarse. Investigadores en Israel recientemente sustituyeron la harina de trigo usada para hacer pan y bizcochos por harina de cebada y se la dieron a pacientes que sufrían de estreñimiento crónico, quienes se habían convertido en dependientes peligrosos de los laxantes.

 

Un increíble 79% de esos pacientes, quienes consumían a diario tres o cuatro productos hechos a base de cebada, se curaron sin ningún tratamiento médico adicional. Para asegurarse por completo de los resultados, los médicos entonces le suspendieron la cebada a los pacientes. A no dudar, casi todos en el grupo de estudio volvieron una vez más a tener problemas de estreñimiento y al cabo de un mes volvieron a necesitar atención médica. Algunas variedades de cebada contienen más fibra que otras. Esto quiere decir que la cebada no ha sido procesada y que por lo tanto contiene más fibra lo cual ayuda a disminuir la presión sanguínea.

 

Usted puede encontrar esta cebada sin procesar en la mayoría de las tiendas de productos naturales. En los supermercados lo más probable es que consiga cebada procesada la cual tal vez no sea tan efectiva para curar el estreñimiento. Pero tenga en mente que incluso esa clase todavía contiene suficiente fibra para reducir el colesterol y para hacer una gran diferencia en su salud. Usted puede sustituir la harina de trigo por la de cebada en la mayoría de las recetas. A continuación un par de formas de añadirle cebada a su dieta. Son el equivalente moderno a las comidas a base de cebada que se consumían en los tiempos bíblicos.

 

Cebada hervida

 

• 1 taza de cebada

• 3 tazas de agua

• 1 pizca de sal

 

Lave la cebada y colóquela en una cacerola con agua y sal. Permita que hierva y cocínela a fuego lento por una hora. La cebada se expandirá tres veces en su volumen. Sírvala con mantequilla o salsa en lugar del arroz.

 

Agua de cebada. El agua de cebada es un remedio antiguo que presuntamente ayuda a aclarar la piel y detiene la formación de arrugas.

 

• ½ Taza de miel o más si gusta.

• 8 tazas de agua

• 1 taza de cebada

• 1 pizca de sal

 

Lave la cebada, luego combínela con agua y sal en una tetera grande. Permita que hierva y cocínela a fuego lento por lo menos por dos horas o hasta 24 horas. Entre mayor sea el período de cocción, más espesa será el agua de cebada. Añada agua conforme estime necesario para mantener su nivel a unas cinco tazas. Cuele el agua, añádale sabor con la miel y sírvala después de enfriarse.

 

Bendiciones de lo alto

SI TE HA GUSTADO ESTA PÁGINA

DEJANOS TU COMENTARIO

Y GRACIAS POR VISITARLA

Comentarios: 0

¿Has sido Bendecido por este Ministerio?

Estado del tiempo en México

Alerta sismica en linea

DE UNTIMA HORA ....

BENDICIONES

DE UNCION DE LO ALTO

Hola, unción de lo alto les desea hermosas y abundantes bendiciones y que el Dios de toda gracia les conceda las peticiones de sus corazones, les animamos a que sigamos adelante con nuevos propósitos y proyectos en Cristo para la honra y gloria de su santo nombre, a no escatimar esfuerzos sabiendo que la obra de nuestras manos no es en vano, por lo que ponemos en sus manos estos pequeños panes y peces y que el Señor lo multiplique en su corazón, y como dice su palabra, no nos cansemos de sembrar que a su tiempo segaremos, bendiciones a todos nuestros Hnos, amigos y siervos en Cristo, así, como a toda la familia en la fe les deseamos los pastores  Martha Régules  y Daniel Vinalay autores de esta página

Gracias

por visitar nuestra página 

¡Muchas gracias!

A todos nuestros amigos y hermanos en Cristo, reciban un abrazo y un saludo desde Quintana Roo. México, estamos agradecidos por todos sus comentarios y bendiciones que nos han dejado en esta página, ¡Que el Señor los bendiga a todos! Es una satisfacción el saber que Dios le ha bendecido abundantemente, les pedimos por favor que sigan orando por nosotros y porque unción de lo alto siga tocando a muchos corazones mas.

 

Amado hermano en Cristo, Antes de cerrar esta página ponga su mano y ore al Señor que su unción se siga derramando y siga tocando los corazones para todo aquel que visite esta página así como lo ha hecho contigo. 

Para recibir peticiones o sugerencias puede escribirnos vía email.

Atención: Los campos marcados con * son obligatorios.